jueves, 30 de diciembre de 2010

Tiempo de balances


Anduve todo este tiempo sin internet, con muchos libros y mucho trabajo, conclusión: blog abandonado. Eso no significa que deje de escribir, sigo firme en http://www.oleadajoven.org.ar/ en donde sobran las razones para sentarse a producir. Pensando en un último post antes de que termine el 2010, voy a hacer el gran "copio y pego" de lo que escribí ayer para la web.

¿Vaso medio lleno o medio vacio? Se que viene lleno, pero termino el año agotada. Me pregunto si algún día aprenderé a administrar las energías... ¿será mucho pedir? Por ahi parezco como los chicos, que corretean todo el tiempo hasta que en un momento, como un muñequito a cuerda, bajan la cabeza y quedaron donde estaban como estaban.  Quien te dice, quizás en el 2011.


Tiempo de balances

Mientras va terminando el año, naturalmente comenzamos a mirar hacia atras y ver todo lo que vivimos durante el año. Pesamos las experiencias para respondernos a nosotros mismos si pudo más el DEBE o el HABER; si hay más tildes en la columna de TERMINADO o en la de PENDIENTES...

Que bueno que podamos vivir en este tiempo la recomendación que nos dejaba el Papa Juan Pablo II al comenzar el nuevo milenio: " recordar con gratitud el pasado, a vivir con pasión el presente y a abrirnos con confianza al futuro".  No estamos abandonados a nuestra propia suerte, sino que Dios nos acompaña en el camino y nos asiste con su providencia.

Te invitamos a que dejes de lado esos pensamientos que no te hacen bien, y a que mires para atras con una mirada agradecida. Que puedas descubrir todo lo bueno que viviste... las experiencias que fuiste recogiendo, aún de aquellos acontecimientos no tan buenos. También la companía de las personas que te quieren; tu fidelidad al camino emprendido sea en  la facu, en el trabajo o en la vida familiar... ¡Qué bueno que también nos animemos a descubrir la presencia de Jesús cada día y en cada momento!. Qué diferente se ven las cosas cuando mirando hacia atras vemos con certeza que siempre estuvo ahi incluso cuando no lo habíamos percibido.

A su vez, no siempre podemos ser lo suficientemente justos con nosotros mismos. Suele pasar que con el cansancio del año, las fiestas, mezclado a una especie de melancolía o tristeza por lo que se va yendo, ese balance quede teñido de un cierto pesimismo. Lo peor ocurre cuando nos ganan los pensamientos del tipo: "Al final, siempre la misma historia"; "Que se acabe este año a ver si empiezo una racha nueva"; "Nunca me sale nada como lo planifiqué"; "Si yo fuera como XXXX podría haber hecho XXXX" etc etc etc


Compartimos una hermosa canción de Kiki Troia... dejemos que resuene por dentro y nos renueve en la esperanza


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